Soñar es un arte, un acto de fe, escribir en el cielo lo que el alma ve.
Los valientes no temen al qué dirán, pues saben que el futuro se forja al soñar.
Soñar es un viaje que empieza en el alma, un llamado profundo que siempre nos calma.
Los valientes lo saben, lo llevan en el pecho, que el poder de soñar es un regalo hecho.
¡¡Soñemos con un mundo mejor!!