Charo te voy a echar de menos, voy a echar de menos nuestras charlas diarias, tu sentido del humor a pesar de tu enfermedad, tantas y tantas horas de compartir vivencias, anécdotas.
Por siempre tendré presente el verano del año pasado, esos días que pudimos compartir aquí en mi casa, charlando, paseando por Madrid junto a mi familia, fueron días muy bonitos para las dos y nunca los olvidaré.
Descansa en paz querida amiga, necesitabas este descanso a pesar de que ninguna queríamos que llegara el momento.
Siempre te recordaré y te querré