En la zona más alta de Budapest se encuentra el bastión de los Pescadores, uno de los miradores más conocidos de la ciudad. Fue el arquitecto Frygyes Schulek el diseñador de esta increíble obra que tardó casi 20 años en finalizarse, en el año 1902. Se utilizó el estilo neogótico y neorrománico como fuente de inspiración para dar forma a la gran terraza con vistas panorámicas, que alcanza los 140 metros de largo.