Gracias Alicia por tu comentario, este pps quedó olvidado o no sé por qué no ví los demás comentarios, en ese tiempo, sorry. Gracias a todos.

Gracias Alicia por tu comentario, claro que hay mucho con qué llenar el corazón y lo primero es con alegría de vivir, aunque el mundo entero esté como está, la vida es el regalo más valioso que nadie más que Dios nos puede dar. Un abrazo y que pases un feliz fin de semana amiga.

Gracias Beatriz por tu comentario, así es muchas personas guardan hasta lo que les estorba, con tal de no darlo a otros lamentablemente. Un abrazo desde México.

Elena, muchas gracias por tu comentario, exactamente ese es el mensaje, reflexionar en que lo que tenemos acumulado en nuestra casa, puede servirle a alguien más. Un abrazo desde México.

Margarita, gracias por tu comentario y sí, ojalá de veras sirva este pps para despertar las ganas de ayudar a otros y este fin de semana, muchos se pongan a desocupar su cuarto de triques o tiliches, trastos, cachivaches, o como se diga en sus países jeje. Un abrazo.

Muchas gracias Mariafe por tu comentario, tan amable como siempre, te mando un gran abrazo desde México. Dios te bendiga.

Herrero, gracias por tu comentario, lamentablemente hay historias que nos parecen irreales a los que tenemos la bendición de no conocer de cerca la miseria y la ignorancia, pero muchas historias como ésta existen en el mundo de la marginación, cosas que ni imaginamos. El narrador solo cuenta el momento en donde la niña recibe su silla de ruedas, no dice que hicieron después, quizá quiso calmar su hambre primero ¿no crees? Lo importante es el hecho de que mucha gente como esa mujer que donó la silla, tiene cosas que hacen falta a otros y no se dan cuenta o les es indiferente, esta historia es para tocar el corazón de ellos. Bendiciones.