La fuente de Cibeles, más conocida por los madrileños como La Cibeles, es una fuente monumental de la ciudad de Madrid, situada en la plaza del mismo nombre, en la zona centro de la capital española. Fue concebida dentro de un plan de remodelación urbana en el siglo XVIII, por iniciativa del rey Carlos III, quien planeaba embellecer la capital del reino según la estética del neoclasicismo. La fuente representa a la diosa madre Cibeles, identificada en el panteón griego con Rea, madre de los dioses olímpicos y símbolo de la tierra y la fecundidad, sobre un carro tirado por leones llamados Atalanta e Hipómenes. La actual plaza se llamó al principio Plaza de Madrid y en el año 1900 tomó el nombre plaza de Castelar.