« Respuesta #1 en: 29 de Febrero de 2012, 08:57:05 am »
A la caída del sol, los enamorados se juran amor eterno atando un candadito con sus nombres al puente.
Una escena que, a la manera de Stendhal, puede quitarte el aire a pura belleza. espero que os guste Isabel
Isabel, gracias por traerme muy gratos recuerdos de Florencia, cierto es bellísima donde quiera que mires, a mi me encantó, creo que tambien tuve el sindrome de Stendhal.
Como anecdota te diré que se me quedó el camison en el hotel jajaja y no volvi a po él, pues cuando me di cuenta ya estabamos lejos.
Un abrazo
, Margarita