No haber hecho lo que se debía hacer, puede hacer la vida miserable y llena de remordimientos, con tal, de muy poco valen las quejas y los lamentos... así sucedió; pero ¡ojo! papás que tienen hijos pequeños, todavía están a tiempo de corregir el error que cometió el protagonista de este relato, espero que así sea. Felicidades papás del mundo. Rodrigo Valencia C.