La vida nos está colocando frente a una situación que está exigiendo mucho de nosotros. Nos hemos tenido que reinventarnos y nos hemos dado cuenta de lo valioso de mucho de aquello que dábamos por sentado.
Estamos aprendiendo a comunicarnos por muchas de las vías que ya teníamos, pero dándoles un mejor uso y nos estamos adaptando a querernos más en la distancia, a saber que estamos más unidos que nunca aún cuando no podemos ni siquiera tocarnos.
Hemos aprendido a abrazarnos a través de las miradas, expresamos amor de todas las maneras que podemos e incluso hemos aprovechado la distancia para alejarnos de lo que no nos conviene.
Espero que nada vuelva a ser como antes, porque justo esa será la ganancia entre tantas pérdidas.
Sobre todo espero que aprendamos a apreciar el momento presente, sin preguntarnos si mañana podremos, tendremos o querremos… Que estemos complacidos con lo que vivimos y sepamos reconocer las bendiciones que justo ahora nos tocan la vida.
No importa si estás solo o acompañado, encuentra los momentos para encontrarte contigo, que ello será el inicio de lo mejor que tendrás para ofrecerte a ti y a todos los que forman parte de tu vida.
Les entrego esta profunda reflexión que te hará meditar sobre el presente y el futuro que esta viviendo el mundo
Un abrazo
Raquel