Hola José Luis: a mí también me ha dejado una opresión en el pecho leer todo lo que pasa en torno al Everest. Tal vez porque soy muy simple, nunca entendí que alguien quiera dejar la vida en ese tipo de intentos; es ganarle a la montaña, es algún tipo de vanidad que se desarrolla en algunas personas, n o lo entiendo.
Y, si, además, hay empresarios inescrupulosos manejando el negocio, menos todavía.
Pero los deportistas saben a lo que se exponen y lo hacen igual; creo que todos alguna vez decimos: a mi no me va a pasar.
En fin, José Luis: te agradezco que nos lo hagas conocer. Cariños. Cholulita.