Vaya lujazo viajar en dicho tren, lo que mas me ha llamado la atención es que se sentirá viajar en una de esas camas al lado de la ventana, digo yo que de día habría que echar el visillo pa que no te viesen.
Pero vaya contrastes que tiene ese país, pasan mas hambre que los pavos de Manolo, y sin embargo disponen de bomba atómica y trenes de súper lujo, si bien, son trenes de súper lujo por dentro, porque por fuera, menudas tartanas, me quedo con nuestro ave, buen trabajo amiga Josefina, dos besos guapísima