Muy bonitos lugares Jose Luis aunque jamás viviría en uno de ellos, me habría pasado la vida pensando que alguno de los niños se caería por ese precipicio y asi seria mas bien un sin vivir, aunque entiendo que la gente que viva allí esté acostumbrada. Tal vez yo debería de acostumbrarme, pero prefiero vivir en lugares menos peligrosos.
Gracias por compartirlo.
Un abrazo con mi amistad hasta Logroño, desde Madrid