Los humanos no poseemos las alas de las aves, pero si una mente poderosa con alas, solo tienes que dejarla volar. Puedes elevarte tanto como quieras.
Hay dos cosas que los padres deben dar a sus hijos raíces y alas. Raíces para darles porte y sentido de pertenencia, pero también alas para ayudarles a liberarse de las limitaciones y prejuicios y darles otras formas de viajar (o más bien, de volar).
"La contemplación de la belleza hace que al alma le crezcan alas"
Saludos
Raquel