Grandes meditaciones sobre la vida y esa prisa que se ha instalado en todo aquello que hacemos.
Llega un día en que te das cuenta de que no se consigue nada con la prisa, al revés, te pierdes muchas cosas en el camino por querer abarcar mas de lo necesario.
Tonémonos la vida con la calma precisa para saborearla, el tiempo no regresa.
Gracias por compartirlo.
Un abrazo con mi cariño y amistad,