Buenos días amig@s. Hoy para empezar el día con un poquito de alegría quiero contaros un chiste que me contaron a mí en uno de mis ingresos hospitalarios. De vez en cuando nos contaban uno para olvidarnos de nuestros problemas. Espero que os guste, a mí me hizo mucha gracia. “Una chica lleva a su casa a su chico, entran en la habitación e inmediatamente ella le sugiere que hagan el 69. ¿El 69? ¿Y eso qué es? –le pregunta el chico- la chica al darse cuenta de que el no tiene experiencia le dice: ¨Yo pongo mi cabeza sobre tus piernas y tú pones la tuya sobre las mías. Y sin saber aún de qué estaba hablando ella, y por no contradecirle el chico accede. En el preciso instante en que los dos estaban en posición, a la chica se le escapó un estruendoso y apestoso cuesco. El chico tosiendo y arrastrándose como puede se tira a un lado de la cama sorprendido. La chica apenada le dice que la disculpe, que no volverá a suceder, y nuevamente toman la posición de antes. Cuando volvían a empezar, otro cuesco nauseabundo se le escapa a la chica. El chico se levanta sin decir nada, a regañadientes comienza a vestirse ¿Qué te pasa? ¿Por qué te vas? - le dice la chica - A lo que contesta el: -Si piensas que me voy a tragar los otros 67 ¡Estás muy equivocada!”.
Hola Buenas Tardes Vicente, en estos dias hemos estado actualizando y transfiriendo la web a otro servidor, agradezco el aviso de esa incidencia, puedes subir los archivos, ya esta corregido, Gracias y cuidate!! Colacho Vera
Una historia de lo mas interesante, parece que "tanto monta, monta tanto" los dos fueron bastante precavidos, aunque no entiendo como la mujer no tenía sus porpias llaves. Eso si fué una falta de previsión total jajajajaja
Una mujer fue de compras. Al llegar a la caja, abrió la cartera para pagar. La cajera vio que allí tenía un control remoto de televisión. No pudo controlar su curiosidad y preguntó: - ¿Siempre anda con el control remoto de televisión en su cartera? Ella respondió: - No, no siempre, pero mi esposo se negó a venir conmigo de compras porque tenía que ver un partido de fútbol, así que me traje el control remoto. Moraleja: Apoye y acompañe a su esposa cuando ella se lo solicite. Pero la historia continúa... La cajera se rió y le devolvió la mercancía a la señora. Sorprendida, ésta le pregunta qué sucedía. La cajera le explica: - Su marido ha bloqueado su tarjeta de crédito. Moraleja: Respeta los pasatiempos de tu esposo. Pero la historia continúa... La esposa sacó la tarjeta de crédito de su marido de la cartera. ¡De seguro no iba a bloquear su propia tarjeta! Moraleja: No subestimes la sabiduría de tu esposa. Pero la historia continúa... Cuando deslizó la tarjeta, la máquina solicitó: INGRESE EL PIN ENVIADO A SU TELÉFONO MÓVIL, o sea ¡al teléfono del esposo! Moraleja: ¡Cuando un hombre está en riesgo de perder, hasta la máquina es lo suficientemente inteligente como para salvarlo! Pero la historia continúa... La mujer sonrió y sacó el móvil que sonó en su bolso: ¡Era el teléfono de su marido! Ella lo había tomado junto con el control remoto para que no la llamara durante sus compras. Ella compró sus artículos y regresó a casa ¡feliz! Moraleja: ¡Nunca subestimes a una mujer! Pero la historia continúa... Al llegar a casa, su esposo se había ido. Encontró una nota en la puerta. . La nota decía: "No encontré el control remoto. Salí con los niños para ver el partido. Llegaremos tarde a casa. Llámame a mi teléfono si necesitas algo". Se llevó las llaves de la casa. Moraleja: No intentes controlar a tu esposo. Puedes perder el control. *La risa es el mejor antídoto contra la depresión. *
Usamos cookies propias y de terceros para mejorar la navegación y mostrar publicidad personalizada según su navegación. Si continua navegando consideramos que acepta el uso de cookies