Como bien dice fue una época muy agitada con la conquista de Gran Canaria y La Gomera.
Que manía con querer conquistar tierras que ya tienen sus propios dueños. Lo único bueno de esas conquistas es que luchaban los cabecillas que proponían esas conquistas, bueno sin tener en cuenta que los reyes que eran los que se haciían los dueños, esos, como siempre, sentaditos en sus tronos sin arriesgar la vida. Sigue pasando igual que antes.
Un abrazo,