Angeles una bella, triste y feliz historia al mismo tiempo.
Es triste que el abuelo tenga que fingir su muerte para conseguir reunir a su familia, pero es feliz porque lo consiguió y pudo verlo.
No permitamos que nuestros mayores tengan que recurrir a estas u otras estrategias para conseguir tenernos cerca, puede llegar el caso que no sea mentira y no podamos volver a disfrutar de su presencia.
Gracias por compartir.
Un abrazo con mi amistad pñara ti hasta Algeciras, desde Madrid