La pequeña iglesia dedicada a la Degollación de San Juan, que permanece cerrada la mayor parte del tiempo, data del siglo X y algunos la consideran de origen templario, lo que es imposible, puesto que dicha orden no fue creada hasta 1119, y documentos anteriores a esta fecha acreditan su existencia. En 1053 fue donada, por IÑIGO LÓPEZ, señor de Vizcaya, al monasterio de San Juan de la Peña situado cerca de Jaca en Huesca.