El castillo de Neuschwanstein ("La nueva piedra del cisne") está situado en el estado federado de Baviera cerca de Füssen, Alemania. Lo mandó construir Luis II de Baviera, el “rey loco”, en 1866. Su nombre original era Nuevo castillo de Hohenschwangau, en honor del castillo donde el rey pasó gran parte de su infancia. El nombre fue cambiado después de la muerte del rey. Es el edificio más fotografiado de Alemania y uno de los destinos turísticos más populares en ese país, con 1,4 millones de visitantes anuales.